Después del éxito del año pasado, en noviembre vuelvo a organizar el viaje fotográfico a la Colonia Menonita y al Lago Epecuén. ¡Dos días de pura fotografía, entre retratos y paisajes!
Quiénes son los Menonitas?
Son un grupo religioso que vive «detenido en el tiempo», con un estilo de vida parecido a los Amish y que pertenece a una rama pacifista del movimiento cristiano anabaptista. Sus orígenes se remontan a principios del siglo XVI, en Suiza, para luego expandirse hacia el norte de Alemania y Holanda durante la Reforma Protestante.
El nombre viene de Menno Simons, sacerdote de la Iglesia católica. Sus seguidores fueron llamados en principio “Discípulos de Menno” y más tarde “Menonitas”. Después de haber sido perseguidos en Europa, decidieron emigrar hacia lugares más tolerantes.
Al día de hoy los Menonitas están distribuidos en 82 países, incluyendo Argentina, que tiene las dos colonias principales en las provincias de La Pampa y Santiago del Estero.
Qué tiene de especial el Lago Epecuén?
Es un espejo de agua con alta concentración de sal (alrededor de diez veces más de la que encontramos en el mar). Se encuentra en el partido de Adolfo Alsina (provincia de Buenos Aires) y debido a las características de sus aguas, parecidas a las del Mar Muerto, se aprovecha para combatir las afecciones reumáticas, de la piel y el agotamiento psicofísico.
El sitio es muy conocido por las ruinas de Villa Epecuén, pueblo turístico argentino que en 1985 quedó completamente bajo el agua después de una inundación provocada por una crecida del lago, que obligó a toda la población de la época a evacuar. En los últimos años el agua empezó a retirarse, dejando visibles las ruinas de la ciudad, que muestran un escenario impactante, casi apocalíptico. Un destino imperdible para los fotógrafos.
Si queres más información sobre Epecuén, visita la página oficial de turismo de Carhue, la ciudad más cercana a las ruinas.