Origen de la regla de los tercios: la sección áurea

El objetivo de cada técnica compositiva es obtener imágenes dinámicas e interesantes. Probablemente ya hayas oído hablar de la Regla de los Tercios, una de las más conocidas cuando se trata de composición fotográfica.

Esta regla establece que una imagen es más agradable cuando sus sujetos/objetos se distribuyen a lo largo de líneas imaginarias que la dividen en terceros, tanto vertical como horizontalmente, definiendo 9 rectángulos iguales. Mejor aún si estos se encuentran en la intersección de las líneas, en los llamados puntos fuertes. Es allí donde instintivamente se enfoca la atención del ojo humano.

Como toda regla, es importante conocerla y consolidarla con la práctica para poderla usar naturalmente cuando estás tomando una foto. A continuación te mostraré algunos ejemplos de su aplicación en paisajes y sujetos:

¿Qué origen tiene la regla de los tercios?

No es más que la simplificación de otra técnica de composición: la «Sección áurea«, también llamada «Proporción áurea», representada por el número 1.6180339887 (Phi).

La sección aurea (o cuadrícula Phi) se obtiene dividiendo el encuadre con una relación de 1,61803:1 entre las columnas laterales y centrales, dibujando 2 líneas horizontales y 2 verticales, que formarán 9 rectángulos, como en la regla de los tercios. Para dar armonía a la imagen debemos tratar de posicionar nuestro sujeto/objeto en uno de los 4 puntos fuertes, definidos por la intersección de las líneas.

El número áureo aplicado a las artes figurativas, como la pintura, la arquitectura, la escultura, permite composiciones interesantes para el ojo humano. Este concepto fue introducido por los pitagóricos y retomado por Leonardo Fibonacci, el gran matemático italiano y creador de la «Sucesión de Fibonacci» («Sucesión áurea»), una serie de números enteros en la que cada número es la suma de los dos anteriores. Por ejemplo: 0,1,1,2,3,5,8,13,21,34,55,89,144, 233 hasta el infinito.

Utilizando la secuencia, estrechamente ligada al número áureo, (la relación entre dos números cualquiera flanqueados en la secuencia da como resultado el «Phi») es posible reconstruir gráficamente la «Espiral de Fibonacci«, una técnica compositiva muy eficaz, que aporta gran equilibrio y armonía a la imagen.

Otra técnica es el «Triángulo áureo«, ideal para elementos que siguen líneas diagonales. El marco está dividido por una diagonal a partir de la cual dibujamos una línea perpendicular desde las 2 esquinas opuestas, dividiendo la escena en 4 triángulos. Existen 4 combinaciones posibles, que crean los «puntos fuertes» en la misma posición que la cuadrícula «Phi». Se debe seguir la diagonal y colocar el sujeto/objeto en uno de los puntos fuertes de gran impacto visual a la imagen.

Aplicar la regla de los tercios cuando estamos tomando una foto no es difícil, mientras que la sección aurea es un concepto más complejo y probablemente más fácil de aplicar después, en la fase de post-producción, recortando correctamente la imagen para conseguir una mayor armonía compositiva.

La opción de Photoshop y Lightroom para recortar según la técnica de composición más adecuada a la situación es muy útil. Practica con viejas fotos y trata de mejorarlas aplicando estas reglas cuando lo consideres apropiado.

Para usar esta opción en Photoshop, deberá seleccionar la herramienta «Recortar» en la barra lateral izquierda, luego en la parte superior, en las opciones de la herramienta encontrará un icono que abre una ventana de desplazamiento con diferentes técnicas de composición para recortar.

Lo mismo en Lightroom, en el menú superior tendrá que seleccionar: Herramientas —> Superponer guías de recorte.